THE ART OF FASHION PT.2: THE WONDEROUS WORLD OF DIANA VREELAND

LA HISTORIA DE COMO DIANA CAMBIÓ EL MET…

Diana Vreeland

Diana Vreeland

Diana vreeland nació en París durante la etapa final de la “Belle Époque”. Su familia era considerablemente adinerada, siendo su padre un “Stockbroker” Inglés y su madre una socialité Americana. En posteriores entrevistas Diana hablaría de cómo su niñez, rodeada de mujeres en vestidos elegantes, hombres en trajes perfectamente planchados y largas caminatas por parques, repletos de fuentes y esculturas, marcarían su vida para siempre.

Diana vreeland was born in Paris, during the last part of the “Belle Époque”. Her family was quite wealthy, her father being an English stockbroker and her mother an American Socialite. In later interviews, Diana would give credit to her childhood, surrounded bu beautiful things and places, of being the thing that marked her the most.

Retrato de Vreeland de joven, por William Acton

Retrato de Vreeland de joven, por William Acton

“Estilo” fue desde el inicio una palabra importante para Diana. Su hermosa y desinhibida madre se esforzaba en recordarle su falta de belleza, y la comparaba constantemente a la de su hermana, pero estilo, si hablamos de estilo, no había como el de Diana.

“Style” was, since the begining, a very important Word in Diana’s life. Her beautiful, reckless mother did her best to remind her of her lack of beauty, and constantly compared her to her sister, but when it came to style, there was only one Diana.

Tuvo la suerte de ser joven durante los años 20, Con el sonido del Jazz rugiendo a su alrededor, y fue en esta época dónde descubrió su amor desenfrenado por el baile, el movimiento y portarse mal .  Movimiento sería  algo que también la seguiría por siempre. Fue en estos años en los que una Reputación escandalosa brotaría, pero  a Diana lo habría podido importar menos, ella estaba bailando.

She was lucky enough to be Young during the 20’s, with Jazz music loud in the backdrop of her life. It was during this time that she discovered her Deep love for dancing, movement and misbehaving. She had quite the reputation, but she could not have cared less, she was dancing.

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Después de casarse se encontraría, por cosas del destino, viviendo en Manhattan. Por su puesto, tratándose de ella, en una época en la que una mujer de su clase social buscando trabajo era considerado impropio, o signo de desesperación y ruina, Diana terminaría trabajando como columnista para  Harper’s Bazaar. Simplemente tenía que hacerlo. Movimiento, esa era la respuesta.

She moved to New York after getting married, and of course since we are talking about her, in a time where wealthy women at work was considered very inappropriate, she decided to go get a job, which she foun as a columnist for Harper’s Bazaar. She had to. Movement, you know? movement is the answer.

Su columna se llamó “Why don’t you?” y consistía de una serie de preguntas llenas de tanto color y surrealismo, como sólo podía hacerlo ella. “Por qué no… atas lazos de Túl negro a tus muñecas?”, “Por qué no…ordenas el cinturón de Celofán de Schiaparelli con tu nombre y número de teléfono en él?” o “Por qué no…redecoras cada habitación de un tono diferente de verde? Esto tomará meses, años…pero será fabuloso, Una mezcla de plantas, vidrio verde, porcelana verde y muebles cubiertos de verde triste, verde alegre, verde claro, verde sutil, y verde veneno?” son algunos ejemplos de la locura de sus columnas.

Her column was called “Why don’t you?” and consisted of a series of fun, random surrealist questions like “why don’t you… tie black Tulle ribbons to your wrists?”

Su potencial fue notado rápidamente, y después de unos años era editora en jefe, y su trabajo la llevó eventualmente a Vogue. Su amor por el arte, La historia, los sueños y crear fantasías revolucionaron el look de las revistas para siempre, dándole un enfoque mucho más conceptual y meticuloso a las editoriales, haciendo que contasen historias llenas de belleza visual, en vez de simples modelos bonitas en las mismas poses de siempre. En los años 60 esto alcanzaría las proporciones más grandes de su trayectoria como editora.

Her potential was noticed quickly, and after years she was finally editor in chief. Her work eventually took her to vogue. Her love for Art, History, dreams and fantasy revolutionized the way magazines looked, she changed it from pretty models in boring poses, to amazing, colorful, deeply narrative stories. This would reach its peak during the 60’s.

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Editorial de Vreeland

Pero la magia no duraría para siempre, después de trabajar muchos años en Vogue, años en los que amo su trabajo, se encontró con que las revistas ya no la querían más como editora. Fue despedida de Vogue de repente, sin ninguna consideración. El choque fue terrible. En 1973, después de un tiempo sin rumbo consiguió trabajo como consultora en el Costume Institute del “Metropolitan Museum of Art”, gracias a los esfuerzos y campañas de su amiga, Jackie Kennedy.

But the magic couldn’t last forever, and after many years of work she loved so much, she was unceremoniously fired from her position. She felt the blow. In 1973, after some time feeling a Little bit lost, she got a job as consultant at The Met’s Costume Institute, thanks to her friend Jackie keneddy’s campaining.

Cuando llegó no había exhibición, la ropa estaba toda archivada, guardada y no estaba siendo explotada. Diana se puso a trabajar sin parar, sacando la ropa y creando fabulosos conceptos, donde la fantasía y la expresión de la era o cultura representada era más importante que los hechos, y para Diana más real.  Su visión personal de cada rincón de la historia era maravillosa, porque hablaba de ellos como si los hubiera vivido. En una ocasión ordenó que se hiciera una gran peluca del siglo XVII para una exhibición, pero cuando llegó no pareció estar satisfecha, y realmente no lo estuvo, no hasta que la peluca casi tocó el techo de la galería. Para Diana se trataba no solo de representar las cosas tal cual habían sucedido, sino de hacer sentir, de transportar, de comunicar ideas.

When she arrived there was no exhibition and all the garments were archived. She started by taking everything out, creating fabulous concepts, where fantasy and expression of the era or culture represented was more important than the actual facts, and for Diana, much mor real. Her personal vision of every corner of history was amazing because she talked about them as if she had lived through them. On one occasion, she ordered a big XVIII century wig, but when it arrived she didn’t seem to be satisfied. And she wasn’t. Sje wasn’t satisfied until the wig almost reached the ceiling. For her, it wasn’t just about being faithful to history, it was about conveying what it felt like.

Exhibición de Vreeland

Exhibición de Vreeland

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También comenzó a pasearse por Studio 54,  a hacerse amiga de las más grandes estrellas, que hacían cola para entrar a su obra maestra, una obra que molestaría a muchos de sus superiores en el Met, que estaban preocupados de que Diana transformara su muy serio museo en un circo de la farándula. Pero no pudieron detenerla, así que exactamente como ella quiso su gran idea salió a la luz : The Met Gala.

She also started making appearences at Studio 54, befriendind all the famous stars, who would go in line to get into her biggest piece of work, her masterpiece, an idea that bothered many of her superiors at The Met. They were afraid Vreeland was turning their precious museum into a Jet Set circus. Still they couldn’t fight it, and so her great idea came to life: The Met Gala.

Hoy en día la gala del Met es el evento más importante y grande de la industria, y las exhibiciones del Costume Institute, aún hechas con la misma pasión, de las más visitadas. Así fue como Diana Vreeland cambió el mundo alrededor de ella, a dónde quiera que fuese.

Today The Met Gala is the biggest event in fashion, and the exhibitions of the Costume Institute are still being made the way she liked it, with the same passion. That is the story of how Diana Vreeland changed the world around her, wherever she went.






maira valderrama